Sueños frágiles de Yara Zgheib es una obra absolutamente aterradora, pero a la vez absolutamente esperanzadora que nos introduce en el doloroso mudo de la anorexia.
Nos cuenta en primera persona la historia de Anna, parisina de 26 años, bailarina y anoréxica. Comienza contándonos su matrimonio con Mathias, sus paseos por París, y su posterior traslado a Estados Unidos donde él tiene una excelente oportunidad de trabajo. Y a la vez nos va dando pequeñas claves de cómo y por qué va dejando de comer y cada vez hace ejercicio de forma más compulsiva. Cuando la situación ya no puede ir a peor, Mathias la lleva a un centro de rehabilitación.
Aquí comienza la enternecedora historia de la casa de melocotón, 17 Swann Street, donde un grupo de mujeres lucha contra sus peores demonios.
Os puedo asegurar que Yara cuenta el pánico que le entra a Anna ante las comidas de manera tan real que el lector puede imaginar cada sabor, cada textura, cada caloría. Es verdaderamente impresionante la prosa de la autora, como nos conduce a través de la angustia, cómo nos comprender algo de lo que no teníamos ni idea y cómo nos hace ponernos en la piel de estas mujeres. ¿Cómo una persona puede llegar al punto de casi dejar de serlo?:” ¿A qué me dedico en la vida real? Mi respuesta sincera sería: Hace años que no tengo vida real. En esta he pasado la mayor parte de los días evitando comer.”
Otra de las reflexiones más importantes del libro, es lo necesaria que es la ayuda y el apoyo de los demás para poder salir de este hoyo sin fondo. Estas mujeres desde sus propias miserias forman una red de ayuda infinita que impide que caigan más en ese hoyo. La desesperación se hace también patente en las familias que ven al enfermo ir matándose poco a poco sin ser capaz de reconocer su problema.
Aunque pudiera intuirlo, nunca tuve una percepción tan real de esta enfermedad. Como ya dije, la autora hace un trabajo increíble para transmitirnos los sentimientos de Anna. Y también nos da un rayo de esperanza en el convencimiento de que todo puede arreglarse y salir bien.
Hola.
ResponderEliminarCon este libro no me animo porque viví la anorexia de mi mejor amigo (sí, los hombres también la padecen) y fue un infierno por lo que no quiero volver a revivirlo así sea con una lectura.
Un saludo.
Entonces no lo leas, es verdaderamente duro. Muy real. Muy bien escrito pero duro. Gracias por pasarte.Bss
ResponderEliminar