Esta es la primera novela de Anna Hernández, licenciada en Periodismo que entre otras cosas, realiza reportajes sociales. Esta es la base para una novela de vidas tan problemáticas y situaciones tan extrañas.
La historia: Nils es un policía sueco a cuyo hijo, Axel, secuestran cuando estaba en un parque jugando con Elena Rius, inspectora de la policía española, que también desaparece. Como es evidente, ambas policías se vuelcan en el caso en una carrera por salvar la vida del pequeño.
Pero más allá del thriller, La mecedora es una novela que destripa y pone al descubierto la personalidad de los tres personajes principales y que hace preguntarse al lector si puede existir la felicidad dentro del dolor. La perfecta construcción de los personajes por parte de una autora novel nos hace pensar en lo mucho que conoce al ser humano.
El personaje de Mykola Solonenko es absolutamente impactante. Tras una infancia desoladora logra encontrar su camino traficando con drogas. Su obsesión con su propio hijo, Oleg, hace que rapte a Elena y a Axel. Y este rapto es lo verdaderamente impactante de La mecedora. Mykola se mueve por venganza hasta que empieza a moverse por amor.
Elena Rius, hija de una familia acomodada de Barcelona que siempre le llevó la contraria a su vida, parecía estar siempre fuera de lugar hasta que se hizo policía.Un desengaño amoroso le lleva a pasar unas vacaciones a Suecia, sin saber lo que la esperaba. Tras su rapto, va observando los movimientos de Mykola y protege al niño a toda costa. ¿Siente Elena el síndrome de Estocolmo?
“En la tarde de ese martes, 4 de octubre, el nacimiento de Oleg fue el argumento de una historia que estremecería a la inspectora y que cambiaría, radicalmente, el concepto que tenía de un hombre capaz de abducirla y convertirla en una Elena que ni ella misma reconocía.”
El tema de fondo es la superación personal. Mykola es un boxeador que se levanta una y otra vez tras cada golpe. Elena es una luchadora que no se detiene ante nada.
Nils es un policía amargado por sus muchos fracasos personales, mujeriego, bebedor con otro misterio del que no sabremos nada hasta casi el final. Su lucha es recuperar a su hijo a cualquier precio. Es un personaje muy oscuro. Que en contraposición a los anteriores no supera sus errores.
La estructura de la novela también es sorprendente: cuando parece que va a acabar, vuelve a empezar y luego acaba de repente, dejando abierto el principio de una segunda parte. La autora también juega a darnos pistas al final de algunos capítulos: por ejemplo, cuando nos habla de la testosterona del biólogo colombiano…
En resumen, no solo la trama de la mecedora es inquietante, la fuerza real de la novela es la construcción de unos personajes que nos llegan muy adentro, personas rodeadas de problemas que de repente se ven inmersos en una relación que no comprenden y que no pueden manejar.
Y ¿qué pasa después del rapto? Hay que leer La mecedora para comprobar por qué la historia empieza de nuevo con fuerza inaudita.
¡Hola! Ya había visto por ahí esta novela y la verdad es que me llama mucho la atención. Me encanta la novela negra y por lo que cuentas, tiene buenos personajes y una trama que engancha. Lo anoto para leerlo
ResponderEliminarBesos
Ya nos dirás si te gusta. Es adictiva y sus personajes muy profundos. Gracias
ResponderEliminarHola.
ResponderEliminarEn esta ocasión no me animo ya que no termina de llamarme del todo y así voy aligerando mi lista de pendientes.
Un saludo y gracias por la reseña.
Gracias por pasarte. La próxima seguro q acertamos
ResponderEliminarHola!!
ResponderEliminarSe ve interesante, gracias por la recomendación.
Besos💋💋💋