viernes, 26 de enero de 2018

Un nuevo misterio en Cárcar. Te daré un beso antes de morir de Estela Chocarro



Te daré un beso antes de morir comienza con un capítulo muy corto y muy intenso en el que, Víctor Yoldi y Rebeca Turumbay, los protagonistas de la saga de Estela Chocarro, se reencuentran en una situación peligrosa y complicada.

En esta tercera entrega de la serie, Rebeca estudia en Florencia alejada de Cárcar y de sus amigos, pero rodeada del arte que la apasiona. Víctor trabaja en el Diario de Navarra y es allí donde le proponen que haga un reportaje sobre la recién inaugurada cárcel de Pamplona. En ella visita a Jonás Sádaba, vecino de Cárcar, que le cuenta sus sospechas sobre un posible asesinato cometido dentro de la cárcel. Cuando en un permiso Jonás regresa a Cárcar y es asesinado, Victor no duda en poner su vida en peligro para resolver el nuevo misterio con la ayuda de sus amigos, los ancianos de Cárcar.

El asesinato real de un niño, ocurrido en Estados Unidos, le dio a Estela Chocarro la inspiración para Te daré un beso antes de morir y es lo que le sirve para preguntarse cómo un hecho tan cruel condiciona la vida de la familia, del asesino y de la gente que les rodea.

En esta novela se entrelaza la vida dentro de una prisión con la vida de los círculos del poder económico.  La cárcel se revela como una sociedad en si misma con distintos grupos que luchan por el dominio, el prestigio o la supervivencia. Las clases altas, simbolizadas con una de las torres de la Castellana en Madrid, aparecen como otra sociedad sombría capaz de comprar o de aplastar a todo lo que amenace sus privilegios. Sin embargo, cuando un secreto se mantiene durante muchos años, al final el tiempo acaba por poner las cosas en su sitio, casi siempre...

Los personajes han evolucionado desde la publicación de El próximo funeral será el tuyo. A pesar de que en esta entrega Rebeca está en principio alejada de Navarra, vuelve para ayudar a Victor a descubrir al culpable de esta serie de crímenes. Otros personajes de las anteriores novelas van cobrando protagonismo, como la forense Cristina Zudaire, que comparte con ellos tanto la investigación como los sentimientos.

La prosa es sencilla, ágil, de la que engancha al lector. Está narrada en tercera persona pero desde el punto de vista del personaje que lleva la carga de cada capítulo.

En esta ocasión se amplían los paisajes en los que se desarrolla la novela. Cárcar, por supuesto, Pamplona, Madrid y Florencia. La tranquilidad de la población navarra contrasta una vez más con la velocidad de las grandes ciudades. También se describen diferentes escenarios, como la remodelada cárcel de Pamplona, La torre de cristal de Madrid, un centro de salud mental de lujo, bares como lugares de encuentro. Los personajes también son muy diferentes entre sí: ancianos, jóvenes, presos, millonarios, madres, padres, hijos…


Es esta una novela llena de contrastes que sigue manteniendo los misteriosos paisajes navarros como escenario de una historia llena de misterios y llena de amistad y en la que, una vez más, Estela Chocarro, acierta. 

viernes, 19 de enero de 2018

El maloliente sumario del cadáver hinchado, de Gaona Pérez. Una investigación rural


Buscando en las minas de Amazon joyas con las que sobrevivir a esta semana de resaca festiva, descubrí un título que no pude pasar por alto El maloliente sumario del cadáver hinchado, de Pedro José Gaona, qué suerte tuve…

Roberto Buenahora es un funcionario de justicia algo caradura que disfruta de una existencia relajada y sin problemas en Fuenteamarga, donde vive y trabaja. Su casi aburrida se ve alterado por la muerte de Francisco Garcés, un antiguo delincuente habitual que regresa al pueblo después de varios años alejado. Impulsado por su amigo Andrés, excéntrico dueño de la funeraria local, “La Eternidad”, Roberto se va introduciendo sin quererlo en la investigación de lo que parece ser un asesinato.
Antiguas relaciones y secretos salen a relucir en esta amena novela negra, en la que el humor es su hilo conductor, y donde se muestra con gran fidelidad el trabajo de un juzgado de instrucción.

Roberto Buenahora, detective por casualidad, narra en primera persona ayudado por una voz que nos enseña lo que Roberto no ve, la investigación de un “crimen que huele mal”.  Trabaja como oficial judicial en el Juzgado de Fuenteamarga, posición que le permite acceder a datos a los que el resto de mortales no accederíamos. Vive en una pequeña población en la que todos se conocen, en la que no hay secretos sino rumores y donde el pasado de todos ellos está entrelazado. Los personajes que le rodean son, sin quererlo o deseándolo furiosamente, ayudantes del encargado de descubrir al asesino del vecino pródigo. Estos son María, su novia, que no entiende bien qué está pasando, Andrés pudiente dueño de una funeraria que es realmente el que empuja al funcionario a investigar y es el que patrocina sus investigaciones, Engracia, que riega de horchata los pensamientos del protagonista.

Esta novela es claramente heredera de las historias del ingenioso investigador Plinio que creó el que considero es el padre de la novela negra española, Francisco García Pavón. No sólo los paisajes de Castilla la Mancha y la idiosincrasia de sus personajes nos retrotraen a García Pavón. El sentido del humor como hilo conductor es lo más característico de ambos escritores. En El maloliente caso del cadáver hinchado se describe el día a día de un juzgado rural y, acostumbrados todos a la frialdad de las series americanas, esto supone una ráfaga de aire fresco que nos arranca una sonrisa detrás de otra.


Si lo que queréis es leer una novela que os atrape desde el principio, que esté protagonizada por personajes que, todos ellos sospechosos, os hagan reír en cada capítulo y cuyo final os haga quedaros con la boca abierta, tenéis que leer El maloliente caso del cadáver hinchado. Lo agradeceréis como yo.

viernes, 12 de enero de 2018

Nunca es tarde de Jerónimo Tristante. Premio Ateneo de Sevilla


Jerónimo Tristante deja, por el momento, las novelas ambientadas en el siglo XIX para contar en Nunca es Tarde una historia que se desarrolla en la actualidad y que explica la investigación de unos terribles crímenes que suceden en el Pirineo aragonés. Ha ganado el Premio
de Novela Ateneo de Sevilla.

En una idílica población del norte se celebra una fiesta de Halloween. A ella asiste una niña disfrazada de muerta que desata muchos comentarios en el pueblo, nadie sabe quién es. Un abogado jubilado, al verla de lejos, dice “es Rosa” y esa misma noche se ahorca.
Isabel Amat, una mujer madura con el síndrome del nido vacío y engañada por su marido, empieza a investigar, para matar el tiempo, la historia de su familia. Buscando recortes en la biblioteca del pueblo, descubre una serie de crímenes que se produjeron hace 40 años y se sorprende de que nadie le haya hablado nunca de ellos. Inducida por los cotilleos que ha provocado la niña, el suicidio del abogado que defendió al asesino y la repentina desaparición de una joven en las mismas circunstancias, empieza a investigar la relación de los dos misterios. Quién va a creer a una cuarentona sin nada que hacer… Sólo un escritor noruego que vive retirado en el pueblo y un antiguo amigo colaborarán con ella. A partir de ahí cambia su vida.

En Nunca es tarde Jerónimo Tristante cambia totalmente de registro. La acción está ambientada en la actualidad, lejos del XIX de Víctor Ros; en un paraje rural, nada que ver con el Madrid decimonónico o la posguerra de sus anteriores novelas. La protagonista es una mujer, otro cambio importante ya que el autor siempre tuvo protagonistas masculinos: detectives, policías, abogados... Ahora la que investiga es un ama de casa aburrida y con tiempo libre.
Por poner una pega me hubiera gustado que Isabel Amat no tuviera que plegarse a los estereotipos impuestos (que una mujer necesita tener pareja y mejorar su aspecto físico para ser feliz)

Al comenzar a leer parece que la historia es un cuento de fantasmas, con la aparición de la niña que alborota la impostada tranquilidad de un pueblo paradisiaco, pero los crímenes que en él se producen nos hacen volver bruscamente a la realidad.

Nunca es tarde comenzó siendo un guion y quién sabe si no se convertirá en serie como pasó con la saga de Víctor Ros. Tanto los paisajes del norte como la historia en sí serían una base fantástica para ello.

En resumen Nunca es tarde es una novela con la que disfrutas leyendo, ya que el lenguaje es claro y sencillo y la historia tiene todos los ingredientes que necesita un buen relato de misterio.


viernes, 5 de enero de 2018

Patria de Fernando Aramburu. Vivir en conflicto




Patria, de Fernando Aramburu, es la novela más leída en papel en el 2017 y será la primera historia
adaptada para la televisión por
HBO España. Acumula ya varios galardones: el Francisco Umbral al libro del año, el de la Crítica y el Premio Euskadi de Literatura.

El día en que ETA anuncia el abandono de las armas, Bittori se dirige al cementerio para contarle a la tumba de su marido el Txato, asesinado años atrás, que ha decidido volver a la casa donde vivieron. Esto es visto como una provocación por los habitantes del pueblo y como una imprudencia por su familia.

Impresiones:

Si alguien espera encontrar en la novela las causas que originaron la creación de ETA o las causas que desembocaron en el fin del conflicto armado, tiene que buscar otro tipo de libro.  Para Aramburu estos años son sólo una excusa para mostrar cómo la situación política de un país afecta a la gente a la que la casualidad ha hecho protagonista. Los ideales y los miedos de las dos familias que, durante tres décadas, viven en un pueblo de Guipúzcoa podrían ser los mismos que se hubieran vivido en la guerra de los Balcanes o en la guerra civil española.

Las mujeres protagonistas se ven envueltas en una situación que las obliga a tomar decisiones que en otro momento quizás no hubieran tomado. Son ellas las que, arrastradas por sus maridos o por sus hijos tienen que tomar las riendas de la situación para poder seguir adelante.
Miren pasa de llorar la muerte de Franco a defender con infinita vehemencia los ideales que su hijo Joxe Mari convierte en suyos. Bittori, tras la muerte de su marido, se convierte en una sombra que arrastra con ella a sus hijos.
En algún sitio he leído que Manuela Carmena no recomienda el libro por la imagen que en él se da de la mujer, representada por madres ignorantes y sentimentales dedicadas exclusivamente a sus maridos e hijos, pero en aquellos años el prototipo de mujer era este, más aún en el medio rural, prototipo que por otro lado sólo ha cambiado en la forma y no en el fondo.

Los hijos, también son arrastrados por las circunstancias en las que viven. Es casi imposible que puedan cumplir sus sueños por la presión social y por la presión familiar y sueñan con irse lejos, aunque nunca lo hacen, precisamente por esta presión que sienten.
Nerea, hija de Bittori y empeñada en dejar atrás su pasado dice en un momento:
    “Nos esforzamos por darle un sentido, una forma, un orden a la vida, y al final la vida hace con una lo que le da la gana”

Aramburu presenta cada capítulo desde la perspectiva de cada uno de los personajes, de manera sencilla y usando el lenguaje que ellos utilizarían, intentando no juzgarles. En la narración se dan saltos en el tiempo donde se explican la causa y el efecto de las pequeñas decisiones que pueden cambiar una vida.


Al leer el libro no vamos a cambiar nuestra forma de pensar sobre aquellos años, pero creo que esto no es lo que se pretende. Lo que vamos es a reflexionar por qué nosotros estamos en donde estamos, si la vida de nuestros padres y sus miedos, junto con la sociedad en la que nos ha tocado vivir, nos han empujado de manera casi silenciosa a nuestro presente susurrándonos que la libertad de elección existe.